En un mundo donde la diversidad y la inclusión están ganando terreno, el emprendimiento se ha convertido en una vía prometedora para las personas con discapacidad cognitiva y su grupo familiar. Lejos de ser una barrera, la discapacidad puede ser un catalizador para la innovación y la creatividad.
Los emprendedores con discapacidad cognitiva poseen una serie de cualidades que les permiten destacar y adaptarse al entorno empresarial moderno. Veamos algunas características, que no sólo contribuyen a su éxito personal, sino que también aportan valor y diversidad al mercado:
.- Son proactivos y en la mayoría de los casos se muestran motivados a participar en actividades. Les gusta “ser vistos”.
.- Su pensamiento diferente y su visión del mundo les permite innovar y abrirse a un mundo de posibilidades que tal vez otros no vemos.
.- Entienden el valor del trabajo en equipo y la importancia de construir redes de apoyo.
.- Se pueden adaptar al cambio según las circunstancias, contando con el apoyo adecuado de familiares y/o cuidadores.
Las personas con discapacidad cognitiva pueden emprender en una variedad de áreas y servicios adaptados para aprovechar sus habilidades únicas, como pueden ser actividades de servicio al cliente, temas relacionados con arte y manualidades, gastronomía, entre otros.
La discapacidad no es otra cosa que la capacidad extraordinaria y diferente de ver el mundo. Por eso los invito a que veamos a la persona con habilidades, sueños, gustos y talentos, sin etiquetarla por una condición especial.
Yo soy Aleyda Brugés Hernández y mi misión es apoyar a Cami con su proyecto de vida, potenciando su talento para pintar y dibujar, y superando los retos que trae a diario su condición.
¿Conoces a alguien con discapacidad? Comparte acá tu experiencia con su condición.